La reciente controversia sobre las pruebas de antígeno prostático específico (PSA) para el cáncer de próstata ha dejado a muchos hombres confundidos. En mayo de 2012, se publicó un informe con nuevas pautas gubernamentales sobre las pruebas de PSA. Las directrices desaconsejaban el uso de análisis de sangre que buscan PSA en niveles altos como una indicación de cáncer de próstata. Esta controvertida afirmación ha sido cuestionada por muchos profesionales médicos que reafirman la necesidad de esta prueba.
Las nuevas pautas
En las nuevas pautas, la preocupación era que con las pruebas de PSA de rutina, los hombres estaban siendo tratado innecesariamente para tumores pequeños que no ponen en peligro la vida. Con tratamientos como la cirugía para extirpar el tumor y la radioterapia, los pacientes a veces se arriesgan a sufrir complicaciones por un tumor que habría estado bien si se hubiera dejado solo. Este estudio encontró que solo uno de cada 1,000 hombres sobreviviría al cáncer de próstata debido al descubrimiento de una prueba de PSA.
La recomendación fue recibida de inmediato con la oposición de muchos médicos y sobrevivientes de cáncer. Advirtieron que saltarse la prueba de PSA podría ser más peligroso que hacerse la prueba. También sintieron que las nuevas pautas eran irresponsables porque no había otro método de prueba más efectivo que la prueba de PSA para hombres.