Alison Hugh, residente del Bronx, quedó permanentemente discapacitada después de una cirugía de estiramiento de muslos fallida por parte del cirujano plástico Dr. Ferdinand Ofodile de Nueva York. El procedimiento salió mal y tampoco hubo posibilidad de una cirugía correctiva. Hugh demandó al cirujano y un jurado de Nueva York le otorgó $ 60 millones por su dolor y sufrimiento, tanto en el pasado como en el futuro.

Alison Hugh, residente del Bronx, quedó permanentemente discapacitada después de una cirugía de estiramiento de muslos fallida por parte del cirujano plástico Dr. Ferdinand Ofodile de Nueva York. El procedimiento salió mal y tampoco hubo posibilidad de una cirugía correctiva. Hugh demandó al cirujano y un jurado de Nueva York le otorgó $ 60 millones por su dolor y sufrimiento, tanto en el pasado como en el futuro.
Cómo sucedió el incidente
Alison Hugh fue al cirujano plástico de Nueva York, Dr. Ofodile, para una cirugía de levantamiento de muslos, pero no sabía que el Dr. Ofodile había estado cometiendo negligencia médica desde el principio y que ella sufriría un trauma irreversible y una discapacidad permanente como resultado del próximo procedimiento.
El Dr. Ofodile, al operarla, no empleó técnicas quirúrgicas adecuadas ni médicamente aceptables. Por lo tanto, Hugh quedó deformado y no hubo posibilidad de cirugía correctiva para corregir el problema.
En la demanda de Hugh, su abogado estableció que el Dr. Ofodile tenía tres strikes en su contra, lo que lo hacía responsable de pagarle 60 millones de dólares a Hugh, una de las mayores compensaciones por mala praxis médica jamás ordenada por cirugía plástica en la ciudad de Nueva York.
Las malas prácticas médicas fueron las siguientes:
Strike 1: El Dr. Ofodile no le informó a Hugh sobre los riesgos asociados con el tipo de cirugía que ella había aceptado someterse.
Strike 2: El Dr. Ofodile no obtuvo el consentimiento informado de Hugh para los diferentes aspectos de la cirugía que estaba a punto de realizar.
Strike 3: El Dr. Ofodile no utilizó técnicas quirúrgicas adecuadas durante el procedimiento y se desvió de las prácticas médicas aceptables.
Estas negligencias médicas dejaron a Hugh gravemente herida, y los labios vaginales de su vagina ahora presentan una deformación permanente. Hugh demandó al médico, y su abogado especializado en negligencia médica presentó pruebas suficientes de que había sufrido un dolor considerable debido a los errores del médico. El jurado fue unánime al otorgarle 60 millones de dólares: 10 millones por el dolor y el trauma pasados y 50 millones por el sufrimiento futuro.
Aunque la discapacidad de Hugh nunca podrá revertirse, su abogado se aseguró de que ella recibiera la compensación a la que tenía derecho y que el médico fuera llevado ante la justicia en un tribunal de justicia.
Las víctimas de negligencia médica sufren traumas y dolor severos de por vida debido a la negligencia médica de médicos, personal sanitario e instituciones médicas. Además, sufren dificultades económicas de por vida.
Desafortunadamente, negligencia médica Es común en los hospitales de Nueva York. Estas malas prácticas dejan a decenas de personas con discapacidades y complicaciones de salud de por vida, además de provocar la muerte de muchas.
El aspecto legal
Si usted o un ser querido ha sido víctima de negligencia médica, debe comunicarse con un profesional de la salud con experiencia. abogado de negligencia médica Para analizar su caso y evaluar sus opciones de demanda. Un buen abogado especializado en negligencia médica escuchará su caso, evaluará las pruebas y le dirá si conviene presentar una demanda.
Contacte a un abogado con experiencia en negligencia médica para hablar sobre su caso y explorar sus opciones legales. Para una revisión gratuita de su caso, llame hoy mismo a Rosenberg, Minc, Falkoff & Wolff, LLP. 212-344-1000 or contacto nosotros en línea.